349. Además, comenzó a decir: “Y mi flacura se levanta para testificar en mi rostro” (Iiov/Job 16:8). ÉL PREGUNTA: ¿De qué habla el versículo? ÉL RESPONDE: Dichoso el hombre que se esfuerza en la Torá para reconocer los caminos del Santo, bendito sea Él, pues quien se esfuerza en la Torá, es como si actuara en Su verdadero Nombre. Así como el Nombre del Santo, bendito sea Él, crea leyes EN EL MUNDO, también lo hace la Torá. Ven y mira: A quien infringe los asuntos de la Torá, la Torá asciende y desciende para dejar impresiones en el rostro de esa persona para que tanto los de Arriba como los de abajo las vean. Todos envían sus maldiciones sobre su cabeza, Y ESTA ES LA ESENCIA DEL VERSÍCULO, «Y MI FLACURA SE LEVANTA PARA TESTIFICAR EN MI ROSTRO», ES DECIR, LAS MARCAS QUE LA TORÁ HIZO EN SU ROSTRO.
Comentario de Zion Nefesh:
Continuación del ZD anterior
#349
Continúa diciendo: “Y mi flacura se levanta para testificar en mi rostro” (Iiov/Job 16:8). Pregunta: ¿De qué trata este versículo?. Y responde: ‘Feliz la porción de quien se dedica al estudio de la Torá, para conocer los caminos del Santo, bendito sea Él. Porque quien se dedica a la Torá, es como si se dedicara al mismísimo Nombre de Hashem. Así como el Nombre de Hashem dirige la conducta del mundo, también la Torá dirige el mundo.
Ven y mira: Quien transgrede las palabras de la Torá, la Torá misma sube y baja, y deja marcas en su rostro, de modo que tanto los seres de Arriba como los de abajo lo miran y reconocen la imperfección. Y todos derraman maldiciones sobre su cabeza. Así está escrito: : “Y mi flacura se levanta para testificar en mi rostro”, refiriéndose a las marcas que la Torá crea en su rostro.
Notas:
La Torá está viva y activa. Quienes se aferran a ella se elevan y se conectan con la realidad Divina. Quienes la traicionan quedan marcados por sus propias faltas, llevando una evidencia espiritual visible ante todos los reinos. El arrepentimiento y el estudio de la Torá son las únicas maneras de borrar las marcas y restaurar la luminosidad del alma.