Daily Zohar 4606
Traducción al Español: Daniel Schulman
100. Ra’aya Meheimna (el Fiel Pastorl). «No odiarás a tu hermano en tu corazón: ciertamente reprenderás a tu prójimo…» (Vaikrá/Levítico 19:17). Este precepto es para reprender al que pecó y para demostrarle que lo ama, para que EL QUE REPRENDE no sea castigado. Con respecto al Santo, bendito sea Él, está escrito, «porque Hashem reprende a quien ama» (Mishlé/Proverbios 3:12). Así como lo hace el Santo, bendito sea Él, al reprender a aquellos a quienes ama, así el hombre debe aprender de esta práctica y reprender a su prójimo a QUIEN AMA. ¿Con qué reprende al hombre el Santo, bendito sea Él? Lo reprende con amor, en secreto. Si acepta SU REPRENSIÓN, está bien. Si no, lo reprende abiertamente entre sus amigos. Si acepta eso, entonces todo estará bien. Si no, lo reprende públicamente, ante todos. Si acepta, todo estará bien. Si no, lo abandona y ya no lo reprende; Lo deja para que se vaya y haga lo que quiera.
Traducción al Hebreo:
Comentario de Zion Nefesh:
Continuación del ZD anterior
#100
Vaikrá/Levítico 19:17
“No odiarás a tu hermano en tu corazón: ciertamente reprenderás a tu prójimo, para que no lleves pecado por su causa”
Este precepto es para reprender al que peca y para mostrarle gran amor, demostrando que el que reprende lo ama para que el que reprende no sea castigado. Porque está escrito acerca del Santo, bendito sea Él,
Mishlé/Proverbios 3:12
“Porque Hashem a quien ama reprende, así como un padre al hijo en quien se deleita”
Así como el Santo, bendito sea Él, reprende a quienes ama, así una persona debe aprender de esta manera y reprender a su amigo a quien ama.
¿Cómo reprende el Santo, bendito sea Él, a una persona? Lo reprende con amor, en secreto. Si la persona acepta la reprensión, es bueno. Si no, lo reprende entre sus amigos. Si lo acepta, es bueno. Si no, lo reprende abiertamente delante de todos. Si lo acepta, es bueno. Si no, la deja y ya no la reprende, permitiéndole ir y hacer lo que quiera.
Lección:
El acto de reprender debe mostrar gran amor, enfatizando que la intención es ayudar y cuidar a la otra persona, llevándola al arrepentimiento y la corrección. La reprimenda comienza en secreto, luego entre amigos y luego abiertamente; si todo lo demás falla, la persona queda a su suerte.
Es importante reprender a una persona por amor y de una manera que busque el bienestar de quien está siendo reprendido. El proceso es gradual y garantiza que se realice con sensibilidad y cuidado, reflejando el método de corrección de Hashem.
{||}