Daily Zohar 3814
Traducción al Español: Daniel Schulman
115. Por lo tanto, el Ángel de la Muerte tiene el derecho de gobernar sobre él, como está escrito, «y no se supiere quién le haya muerto» (Dvarim/Deuteronomio 21:1). También tiene permiso, ya que se desconoce QUIÉN HA MATADO A LA VÍCTIMA, para acusar a ese lugar, LA NUKVA. Por lo tanto, «los ancianos de aquella ciudad tomarán una novilla» (id. 3), para quitar el juicio de ese lugar y fortalecerlo contra el poder del Acusador, para que se salve de él.
116. Ven y mira, cuando Iosef se separó de su padre, fue enviado sin escolta o sin comida, y sucedió lo que sucedió entonces. Cuando Iaacov dijo: «Sin duda ha sido despedazado Iosef» (Bereshit/Génesis 37:33), él añadió: «Así descenderé a mi hijo, enlutado, hasta el Sheol» (Id. 35), porque YO CAUSÉ que lo MATARAN, HABIÉNDOLO ENVIADO SIN ACOMPAÑANTE. NO PUEDO DECIR: «NUESTRAS MANOS NO HAN DERRAMADO ESTA SANGRE» (DVARIM/DEUTERONOMIO 21: 7) CON RESPECTO A LA ROTURA DEL CUELLO DE LA NOVILLA, LO QUE SIGNIFICA, «NO LO HEMOS ENVIADO SIN CORTAR». También sabía que sus hermanos lo odiaban y sin embargo lo envié A ELLOS. IOSEF le recordó ESTO ENVIANDO LOS CARROS (TANTO ‘CARROS’ COMO ‘NOVILLAS’ SE ESCRIBEN ‘AGALOT’ EN HEBREO).
Traducción al Hebreo:
116. בֹּא רְאֵה, כְּשֶׁנִּפְרַד יוֹסֵף מֵאָבִיו, בְּלִי לְוָיָה וּבְלִי אֲכִילָה נִשְׁלַח, וְהָיָה מַה שֶּׁהָיָה, וּכְשֶׁאָמַר יַעֲקֹב (בראשית לז) טָרֹף טֹרַף יוֹסֵף, אָמַר כִּי אֵרֵד אֶל בְּנִי אָבֵל שְׁאֹלָה, שֶׁאֲנִי גָרַמְתִּי לוֹ, וְעוֹד – שֶׁהָיִיתִי יוֹדֵעַ שֶׁאֶחָיו שׂוֹנְאִים אוֹתוֹ וְשָׁלַחְתִּי אוֹתוֹ, וְרֶמֶז הוּא רָמַז לוֹ.
Comentario de Zion Nefesh:
Continuación del ZD anterior
# 115
Dvarim/Deuteronomio 21:1
“Cuando fuere hallado muerto, echado en el campo, en la tierra que Hashem, tu Elokim, te da a poseerla y no se supiere quien haya muerto”
El Ángel de la Muerte puede gobernar el lugar donde se encontró al muerto porque no se sabía quién lo mató. Por eso, puede llevar acusaciones a ese lugar e imponer juicios.
Para quitar el juicio del lugar, los ancianos de la ciudad cercana toman una novilla y le rompen el cuello para quitar el control del Ángel de la Muerte y salvar el lugar.
Dvarim/Deuteronomio 21:4
«Y los ancianos de aquella ciudad llevarán la novilla a un valle escabroso, que no se cultiva y que no se siembra y quebrarán la cerviz a la novilla allí en el valle»
Entonces los ancianos se lavan las manos sobre la novilla y dicen:
Dvarim/Deuteronomio 21:7
«Y responderán, diciendo: ‘Nuestras manos no derramaron esta sangre y nuestros ojos no lo vieron'»
# 116
Cuando Iaacov le pidió a Iosef que verificara a sus hermanos (Bereshit/Génesis 37:13), lo envió sin escolta ni comida y luego leemos cómo cambió la vida de Iosef. Cuando Iaacov vio la túnica ensangrentada de Iosef, dijo:
“Y él la reconoció y dijo: ‘La túnica de mi hijo es; ¡alguna bestia feroz lo habrá devorado!, sin duda ha sido despedazado Iosef”
(Bereshit/Génesis 37:33).
Se negó a ser consolado porque sabía que sus hermanos lo odiaban y creían que él era el responsable de su muerte.
No podía decir, «nuestras manos no han derramado esta sangre», como en el caso anterior del asesinado, que nadie sabía quién lo había matado.
Esta es la pista que Iosef le envió a su padre cuando les pidió a los hermanos que llevaran carros (‘agalot’) de regreso a casa, lo cual hemos explicado anteriormente (#112, #113).
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