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Traducción al Español: Daniel Schulman

Traducción al Hebreo:

Comentario de Zion Nefesh:
Continuación del ZD # 4683

#304
Y los caminos sellados son los 32 senderos de la Sabiduría; y los ríos profundos son las Sefirot de Biná; y las diez Expresiones son las diez Sefirot de Da’at, que unen a Jojmá y Biná, que son el secreto de Jojmá, Biná y Da’at de Zeir Anpin.

Todas ellas emanan y se extienden a los mundos desde esa «espina» inferior bajo la Alef, pues la Iud inferior de la letra Alef representa a Zeir Anpin y Nukva, cuyas luces son atraídas a través de la espina inferior de la Iud. Y, por lo tanto, es una regla general: todas ellas están incluidas en la Alef.
De aquí en adelante, las luces dentro de la Alef se expanden en la letra Bet, etc. Y la sabiduría que está grabada aquí es inconmensurable.

#305
Y debido a esto, la Torá, que es el aspecto de Zeir Anpin, es la fuerza sustentadora de todos y la fe de todos para atar adecuadamente el vínculo de la Fe, que es Maljut, con ella. Y quien está circuncidado está ligado a ese vínculo de Fe. Pero sobre quien no está circuncidado, y no está ligado a él, está escrito: «Ningún extraño comerá de cosa santa». Y «ningún incircunciso comerá de ella» (Shemot/Éxodo 12:43, 48).

El espíritu de impureza de su costado se despierta y busca mezclarse con la Santidad. Bendito sea el Misericordioso, que ha separado a Israel, Sus hijos, marcados con la huella sagrada, de ellos y de su impureza. Sobre ellos está escrito: «y Yo te había plantado de buen viñedo, todo él de semilla genuina» (Irmiahu/Jeremías 2:21). Y por eso está escrito: “Darás la verdad a Iaacov”, no a otro; una Torá de verdad a una descendencia de verdad. Entonces Rabí Eleazar se acercó y le besó las manos.

Notas:
La Torá es la fuerza que conecta los mundos y sustenta la Fe, y la circuncisión (Brit) es la conexión espiritual con esta verdad. Quienes se circuncidan llevan la huella sagrada y forman parte de la semilla de la verdad de Hashem. Por lo tanto, son dignos de la Torá de la verdad, que no puede ser entregada a quienes están fuera del Pacto.

Esta enseñanza refuerza el vínculo íntimo entre el pueblo judío, el Brit, la Torá y la verdad divina. A través del Brit, nos unimos al Nombre de Hashem, Su Torá y Su fidelidad a través de las generaciones.

Entre las naciones, hay individuos cuyos corazones se sienten atraídos por la luz de la Torá y que sienten una profunda conexión interior con Hashem y Su sabiduría. Estas personas son descritas, en el lenguaje de los profetas y la Cábala, como personas de «corazones circuncidados».

Este término se refiere a un refinamiento interior, un despertar espiritual en el que se eliminan las barreras del ego, la impureza y el bloqueo espiritual, permitiendo recibir y abrazar la verdad divina.

El profeta Irmiahu habla de este concepto diciendo: «Circuncidaos para Hashem y quitad los prepucios de vuestros corazones» (Irmiahu/Jeremías 4:4) Este versículo enseña que la verdadera cercanía a Hashem comienza con el corazón: a través de la humildad, la sinceridad y un profundo deseo de verdad.

Para quienes no son judíos y desean abrazar plenamente el pacto de Israel y someterse a la conversión, el camino de la Torá los invita no solo a circuncidar sus corazones (la dimensión interior), sino también a expresar físicamente ese anhelo espiritual mediante el Brit Milá (circuncisión).

Este paso representa la impresión del vínculo espiritual en el cuerpo físico, afirmando su entrada en el Pacto Eterno que comenzó con Avraham Avinu. Como enseña la Cábala, el cuerpo y el alma están entrelazados, y el signo externo del Brit refleja la transformación interior que ya se ha despertado en el corazón.

De esta manera, el viaje desde la conexión sincera hasta la conversión plena es uno de unificación espiritual y física, que culmina en convertirse en parte del pueblo de Israel y compartir la misión colectiva de revelar la Presencia Divina en el mundo.

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