Traducción al Español: Daniel Schulman
545. «…se presentarán todos tus varones» (Shemot/Éxodo 23:17). ÉL PREGUNTA: ¿Por qué «todos tus varones»? Rabí Eleazar dijo, literalmente, todos los varones para que reciban la bendición de la fuente del manantial, QUE DENOTA A IESOD. De esto hemos aprendido que cada judío circunciso tiene que ser visto ante el Santo Rey a fin de recibir las bendiciones de la fuente del manantial. Esta es la esencia del versículo, «Cada uno traerá según su mano pudiere dar, conforme a la bendición que Hashem, tu Elokim, te haya dado» (Dvarim/Deuteronommio 16:17), y, «conforme a la bendición que Hashem, tu Elokim». Como hemos explicado, HASHEM ES IESOD, porque r de allí fluyen bendiciones y ellos reciben bendiciones. Afortunada es la suerte de Israel por sobre la de otras naciones.
546. Una vez Israel hizo una peregrinación A JERUSALÉM para celebrar la festividad y había allí muchas personas no judías entre ellos. Ese año las bendiciones no se hicieron presentes en el mundo. Ellos fueron y le preguntaron a Rav Hamnuna Saba. El les dijo, ¿han visto alguna señal QUE INDIQUE QUE LA PEREGRINACIÓN NO HAYA SIDO FAVORABLE? Ellos respondieron que vieron una señal: cuando volvían de allí, todos los caminos estaban bloqueados por el agua, había nubes y oscuridad, por lo cual ninguno de los que fueron pudieron REGRESAR. Por otra parte, cuando llegamos para ser vistos, la superficie de los cielos se volvió oscura y tormentosa. El les dijo, a por cierto que había entre ustedes allí algunas personas no circuncidadas o idólatras. Porque en tales momentos, la bendición sólo alcanza a los circuncisos de Israel. El Santo, bendito sea Él, observa esa señal y los bendice.
Traducción al Hebreo:
546. פַּעַם אַחַת עָלוּ יִשְׂרָאֵל לָחֹג אֶת הֶחָג, וְהִתְעָרְבוּ עוֹבְדֵי עֲבוֹדַת כּוֹכָבִים וּמַזָּלוֹת עִמָּם, וְאוֹתָהּ שָׁנָה לֹא נִמְצְאָה בְּרָכָה בָּעוֹלָם. בָּאוּ וְשָׁאֲלוּ אֶת רַב הַמְנוּנָא סָבָא. אָמַר לָהֶם, רְאִיתֶם בַּתְּחִלָּה סִימָן לָזֶה? אָמְרוּ לוֹ, רָאִינוּ סִימָן, שֶׁכְּשֶׁשַּׁבְנוּ מִשָּׁם כָּל הַדְּרָכִים הָיוּ סְתוּמִים מִמַּיִם, וְעָנָן וַחֲשֵׁכָה נִמְצְאוּ, שֶׁלֹּא יָכְלוּ לָלֶכֶת כָּל אוֹתָם שֶׁעָלוּ לְשָׁם. וְעוֹד, בְּשָׁעָה שֶׁנִּכְנַסְנוּ לְהֵרָאוֹת, פְּנֵי הַשָּׁמַיִם נֶחְשְׁכוּ וְרָגְזוּ. (נֶחֱרַד וְרָאָה) אָמַר לָהֶם, וַדַּאי אוֹ שֶׁיֵּשׁ בָּכֶם אֲנָשִׁים לֹא נִמּוֹלִים, אוֹ עוֹבְדֵי עֲבוֹדַת כּוֹכָבִים וּמַזָּלוֹת עָלוּ עִמָּכֶם, שֶׁהֲרֵי לֹא הִתְבָּרְכוּ בְּאוֹתָה שָׁעָה, פְּרָט לְאוֹתָם יִשְׂרְאֵלִים שֶׁנִּמּוֹלוּ, וּבָאוֹת הַקְּדוֹשָׁה הַזּוֹ מִסְתַּכֵּל הַקָּדוֹשׁ בָּרוּךְ הוּא וּמְבָרֵךְ אוֹתָם.
Comentario de Zion Nefesh:
El texto en Hebreo ha sido extraído del Zohar Mishpatim 545-546
Dvarim/Deuteronomio 16:16 (porción Reé)
«Tres veces al año todos tus varones se presentarán delante de Hashem, tu Elokim »
Hashem nos pide que aparezcamos frente a Él y que veamos el Santo Templo. Este precepto aparece en dos sitios más en la Torá: Shemot/Éxodo 34:23 y 23:17. Este hecho le otorga una gran significación.
La acción de ir a ver el Santo Templo se denomina «Aliá» y significa ‘elevación’. Ver el Santo es un acto de elevación. «Aliá» es el nombre de la acción que realiza la persona cuando es llamada a la Torá. La Torá usualmente se coloca sobre una tarima elevada en la sinagoga. Nos ayuda para tener la comprensión de que la Torá nos proporciona elevación espiritual.
Ver al Santo es una conexión importante y el precepto nos pide acudir durante las festividades de Pésaj, Sucot y Shavuot. Estas festividades representan las tres Columnas del Árbol de la Vida y nos dan plena conexión a éste.
Actualmente no tenemos el Santo Templo en Jerusalén y ni siquiera podemos mirar hacia el sitio de su emplazamiento, porque está ocupado por dos mezquitas, una con cúpula de plata y otra con cúpula dorada. La plata es el aspecto de la Derecha y el oro es el aspecto de la Izquierda. Éstas bloquean la Derecha y la Izquierda, pero nos queda el Muro Occidental, que es el aspecto de Iesod y el canal de la Columna Central.
Cuando llegue el momento, el Monte del Templo se abrirá y tragará lo negativo que se encuentra encima de éste, formando un espacio puro para el Tercer Santo Templo.
Debido a que estamos cerca de este tiempo, el lado negativo se eleva con todo su fuerza para tratar de obtener la mayor cantidad posible antes de que ser tragado para siempre. ISIS es negro y reúne a todo el mal del mundo para la batalla final donde todos serán destruidos. Puede tomar tiempo y dolor, pero va a suceder.
Hasta la victoria final, tenemos que buscar y ver sólo Santidad. Tenemos el Zóhar en nuestras manos y el servicio de Shabat para ver la Torá cuando ésta es elevada. Escanear el Zóhar es un proceso de elevación y cuanto más lo hacemos, mejor nos limpiamos y elevamos.
Lo más importante es ser puro cuando llegamos a ver al Santo. La pureza física y espiritual es importante, de lo contrario la conexión visual es defectuosa y los beneficios son inexistentes.
Aprendemos esto de Ieshaiahu/Isaías 1:12
“Cuando venís a presentaros delante de mí, ¿quién demanda esto de vosotros, de que pisoteéis mis atrios?”
Hashem nos dice que es mejor no venir si no estamos con bien y con corazón generoso. (Sugiero leer todo el capítulo de Ieshaiahu/Isaías 1).
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