Zohar Diario # 1841 – Shlaj Lejá – Llena tu mochila con piedras preciosas

Daily Zohar 1841

Holy Zohar text. Daily Zohar -1841

Traducción al Español:  Daniel Schulman

19. Él le respondió: Es muy cierto QUE EXISTE UNA ABERTURA PARA LOS NO CREYENTES. Es importante ser conscientes y prestar atención a ello. Mientras hablaban, notaron que un hombre se acercó a ellos y pidió agua, ya que estaba sediento y cansado del intenso calor del sol. Ellos le dijeron: ¿Quién eres? Él respondió: Soy judío y estoy cansado y sediento. Ellos le preguntaron: ¿Estudias Torá? Él les dijo: Antes de involucrarme en una conversación con ustedes, déjenme trepar esta montaña. Allí voy a recoger agua y a beber.

20. Rabí Iesa tomó una bota de piel llena de agua y se la ofreció al hombre. Después que él hubo bebido, dijo: Subamos A LA MONTAÑA por agua. Escalaron la montaña donde encontraron un pequeño arroyo de agua y llenaron un contenedor. Se sentaron y el hombre les dijo: Pregunten ahora, ya que me esfuerzo por la Torá a través de uno de mis hijos que he matriculado en la casa del Rabí, Y ÉL ME ENSEÑÓ TORÁ. Gracias a él he hecho grandes progresos en Torá. Rabí Jizkiá dijo: Si OBTUVISTE GANANCIAS EN TORÁ a través de tu hijo, eso es bueno. Sin embargo, debo elevar  lo que estamos discutiendo en este momento a otra altura, ES DECIR QUE ÉL NO ERA LO SUFICIENTEMENTE SABIO COMO PARA EXPLICAR SU PREGUNTA. El hombre habló: Hablen, ya que a veces en el silo del pobre, ES DECIR EN LA VASIJA QUE SE ENCUENTRA EN LA PARTE SUPERIOR DE LA PIEDRA DE MOLER, uno encuentra una piedra preciosa.

 

Traducción al Hebreo:

19. אָמַר לוֹ, וַדַּאי כָּךְ זֶה, וְיֵשׁ בּוֹ לָדַעַת וּלְהִסְתַּכֵּל. בֵּין כָּךְ רָאוּ אָדָם שֶׁהָיָה בָּא, וּבִקֵּשׁ מֵהֶם מַיִם, שֶׁהָיָה צָמֵא וְעָיֵף מֵחֹזֶק הַשֶּׁמֶשׁ. אָמְרוּ לוֹ, מִי אַתָּה? אָמַר לָהֶם? יְהוּדִי אֲנִי, וַאֲנִי עָיֵף וְצָמֵא. אָמְרוּ, עָסַקְתָּ בַּתּוֹרָה? אָמַרלָהֶם, עַד שֶׁאֲנִי אִתְּכֶם בִּדְבָרִים, אֶעֱלֶה לָהָר הַזֶּה, וְשָׁם אֶקַּח מַיִם וְאֶשְׁתֶּה.
20. הוֹצִיא רַבִּי יֵיסָא כְּלִי אֶחָד מָלֵא מַיִם וְנָתַן לוֹ. אַחַר שֶׁשָּׁתָה, אָמַר, נַעֲלֶה אִתְּךָ לַמַּיִם. עָלָה לָהָר, וְנִמְצְאוּ חוּט מַיִם דַּקִּיק, וּמִלְּאוּ כְלִי אֶחָד. יָשְׁבוּ. אָמַר לָהֶם אוֹתוֹ הָאָדָם, כָּעֵת תִּשְׁאֲלוּ, שֶׁהֲרֵי אֲנִי הִשְׁתַּדַּלְתִּי בַתּוֹרָה עַל יְדֵי בְּנִי אֶחָד, שֶׁאֲנִי הִכְנַסְתִּיו לְבֵית רַב וּבִגְלָלוֹ הִרְוַחְתִּי בַתּוֹרָה. אָמַר רַבִּי חִזְקִיָּה, אִם עַל יְדֵי בִנְךָ – טוֹב הוּא. אֲבָל הַדָּבָר שֶׁאָנוּ בוֹ, אֲנִי רוֹאֶה שֶׁלְּמָקוֹם אַחֵר רוֹצֶה לַעֲלוֹת. אָמַר אוֹתוֹ הָאָדָם, אֱמֹר דְּבָרְךָ, שֶׁלִּפְעָמִים בְּתַרְמִיל הֶעָנִי תִּמְצָא מַרְגָּלִית.

 

Comentario de Zion Nefesh:

Kohelet/Eclesiastés 3:19
«Porque lo que sucede a los hijos de los hombres, lo mismo sucede a las bestias; es decir, un mismo suceso les acontece: como mueren éstas, así mueren aquellos; y un mismo aliento tienen todos ellos; de modo que ninguna preeminencia tiene el hombre sobre la bestia; ¡porque todo es vanidad!»

Rabí Iesa y Rabí Jizkiá encontraron que este versículo puede ser un obstáculo para quienes no tienen fe. Este compara la vida y la muerte del hombre y las bestias como si fueran lo mismo.
Ellos explicaron que las palabras del Rey Salomón, que es Kohelet en el Eclesiastés escribieron sus palabras en código a partir de una sabiduría superior.

El Zohar nos cuenta una historia (iniciada en ZD 1538) acerca de los dos Rabís que encontraron a un hombre simple en su camino que estaba cansado y sediento y les pidió que esperaran hasta que subiera a la montaña y consiguiera un poco de agua. Le dieron agua y le preguntaron si estudiaba Torá, con la esperanza de compartir el estudio con él. Él les dijo que él no había estudiado Torá pero que había puesto a su hijo a estudiar con un Rabí y que debido a eso había ganado la elevación espiritual de la Torá.

Rabí Jizkiá lo elogió por ganar la luz de la Torá a través de los esfuerzos de su hijo y explicó que su estudio debe ser mirado desde un lugar más elevado. El hombre les pidió que compartieran sus preguntas, diciéndoles que a veces se puede encontrar piedras preciosas en la mochila de una persona pobre.

Esta historia está codificada, pero la lección principal es que el hombre ha construido en un canal de Jojmá y puede conectarse y obtener niveles espirituales superiores con algunos esfuerzos. Como un padre que pone a su hijo a estudiar Torá se convirtió en un canal para la Luz que su hijo reveló a través de su estudio.

Esta lección continúa el estudio del ZD anterior. Ganamos una Luz grande y preciosa cuando apoyamos a quienes revelan la Luz. Encontrar buenos canales de Luz y apoyarlos para que uno pueda llenar su mochila con piedras preciosas.

Para aquellos que aún no son tan espirituales, la mochila es el aspecto de la vasija individual y las piedras preciosas son regalos de la Luz que puede manifestarse en lo que más necesitamos a fin de ayudar con nuestro proceso de Tikún.

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