Daily Zohar 3877
Traducción al Español: Daniel Schulman
111. Y tenemos que ponernos de pie ante el Santo Rey Superior con temor y temblor, porque entonces Él extiende Su mano derecha hacia ella, QUE ES LA BENEDICCIÓN DEL ‘ESCUDO DE AVRAHAM’, EL SECRETO DE LA COLUMNA DERECHA. Luego Él puso Su mano izquierda debajo de su cabeza, DE ACUERDO CON EL SECRETO DE «SU MANO IZQUIERDA ESTÁ DEBAJO DE MI CABEZA» (SHIR HASHIRIM/CANTAR DE LOS CANTARES 2:6), QUE ES LA BENDICIÓN DE ‘ERES ETERNAMENTE PODEROSO’, QUE ES LA COLUMNA IZQUIERDA. Luego se abrazan juntos en BESOS, EN LA BENDICIÓN DE ‘EL SANTO EL’, QUE ES LA COLUMNA CENTRAL PORQUE A PARTIR DE ALLÍ ESTÁ EL SECRETO DEL BESO HASTA LAS TRES ÚLTIMAS BENDICIONES. Estas son las tres primeras bendiciones DE LA AMIDÁ. El hombre debe dedicar su corazón y su voluntad y meditar en todos esos arreglos y secuencias de la oración, con su boca, su corazón y su voluntad juntos.
112. Ahora que el Rey Superno y Maljut están dichosamente unidos en esos besos, quien necesite pedir algún pedido O PETICIONES, puede hacerlo, porque es un tiempo de buena voluntad. Dado que un hombre presenta sus peticiones ante el Rey y la Reina, ES DECIR, EN LAS DOCE BENDICIONES DEL MEDIO, luego debe prepararse, en voluntad y corazón, para las últimas tres BENDICIONES, para despertar la bienaventuranza secreta, porque de estas tres BENDICIONES él es bendecido por una devoción diferente, EL SECRETO DEL UNISONO. Y el hombre debe prepararse para dejarlos en esta bienaventuranza secreta en estas tres BENDICIONES, COMO FUE EXPUESTO EN EXTENSIÓN. Por lo tanto, debe desear que los seres inferiores sean bendecidos con esas tres bendiciones de la bienaventuranza secreta.
Traducción al Hebreo:
112. עַכְשָׁו שֶׁהַמֶּלֶךְ הָעֶלְיוֹן וְהַגְּבִירָה הֵם בְּחִבּוּר אֶחָד בְּשִׂמְחָה בְּאוֹתָן נְשִׁיקוֹת – מִי שֶׁצָּרִיךְ לְבַקֵּשׁ בַּקָּשׁוֹת, יְבַקֵּשׁ, שֶׁהֲרֵי אָז שְׁעַת רָצוֹן הִיא. כֵּיוָן שֶׁשּׁוֹאֵל אָדָם שְׁאֵלוֹתָיו מִלִּפְנֵי הַמֶּלֶךְ וְהַגְּבִירָה, אָז יַתְקִין עַצְמוֹ בִּרְצוֹנוֹ וְלִבּוֹ לְשָׁלֹשׁ אֲחֵרוֹת לְעוֹרֵר שִׂמְחָה שֶׁבַּסֵּתֶר, שֶׁהֲרֵי מֵאֵלּוּ הַשָּׁלֹשׁ הוּא מִתְבָּרֵךְ בִּדְבֵקוּת אַחֶרֶת. וְיַתְקִין אָדָם אֶת עַצְמוֹ לָצֵאת מִפְּנֵיהֶם, וּלְהַנִּיחָם בְּשִׂמְחָה גְּנוּזָה שֶׁל אֵלּוּ הַשָּׁלֹשׁ. וְעִם כָּל זֶה, שֶׁיִּהְיֶה רְצוֹנוֹ שֶׁיִּתְבָּרְכוּ הַתַּחְתּוֹנִים מֵאוֹתָן בְּרָכוֹת שֶׁל שִׂמְחָה נִסְתֶּרֶת.
Comentario de Zion Nefesh:
Continuación del ZD anterior
#111
Shir Hashirim/Cantar de los Cantares 2:6
“¡Está su izquierda debajo de mi cabeza y me abraza su diestra!”
Cuando nos ponemos de pie para la oración de la Amidá, nos paramos con miedo y temblor porque estamos frente al Rey Superno. Llegó Su mano derecha a la Shejiná en el momento de la bendición de ‘Maguen Avraham’, ‘Escudo de Avraham”, ese es el secreto de la Columna Derecha. Luego, «Está su izquierda está debajo de mi cabeza» en la bendición de ‘Atá guibor leolam’, ‘Eres poderoso para siempre’, esa es la Columna Izquierda. Luego ambos se abrazan y se besan en la bendición de ‘HaMalaj Hakadosh’, ‘Bendito seas, Hashem, el Santo Rey’ esa es la Columna Central.
Estas son las tres primeras bendiciones de la Amidá. Debemos tener la conciencia, las palabras y el corazón como uno solo para conectarnos adecuadamente con la oración.
#112
Ahora que el Rey y Maljut, la Shejiná, están en unidad y alegría, es hora de que le pidamos al Santo Rey y a la Reina nuestras necesidades que se expresan con las doce bendiciones que siguen a las tres primeras. Entonces la persona se prepara, su voluntad y su corazón para las últimas tres bendiciones para evocar el gozo en el ocultamiento. Debido a las tres bendiciones, es bendecido con otra devoción, que es el secreto de su unificación. Y así debería ser su deseo que los niveles inferiores sean bendecidos con esas bendiciones de este gozo.
Lección:
Las primeras tres bendiciones nos conectan con las tres Sefirot superiores usando las tres Columnas establecidas por Avraham, Itzjak y Iaacov. Las 12 bendiciones que siguen describen todo lo que necesitamos en este mundo, comenzando con pedir sabiduría y conocimiento, luego pidiendo Teshuvá, perdón, redención, salud, sustento y más.
La oración de la Amida cubre todos los aspectos de nuestras necesidades. Debemos hacerlo con asombro y temor porque estamos ante el Santo Rey, pidiendo por nuestras necesidades. Cuando nos reunimos para tener al menos diez hombres orando juntos, rezamos la Amida individualmente en silencio.
El líder de la oración luego repite la Amida en voz alta para incluir todas las oraciones individuales juntas. Incluso aquellos que no entienden la oración de la Amidá pueden ser parte del todo, y cuando escuchan el nombre de Hashem y responden con ‘Baruj Hu ubaruj Shemó’, ‘Bendito sea Él y bendito Su nombre» y dicen Amén al final de cada bendición, atraen la Luz hacia las diferentes vasijas creadas por las bendiciones.
{||}